Vitamina B12 podría reducir la velocidad de la progresión del Parkinson

Un nuevo estudio sugiere que los niveles bajos de la vitamina B12 en pacientes empezando a desarrollar Parkinson puede estar relacionado con la velocidad en la que progresa la enfermedad. Esto puede significar que un suplemento de esta vitamina podría ser utilizado para tratar la velocidad del desarrollo de ciertos síntomas.

 

No es nueva la información sobre la deficiencia de la vitamina B12 en los pacientes de Parkinson. Su ausencia puede potenciar la presencia de algunos síntomas como la depresión, ansiedad, paranoia, entumecimiento muscular y debilidad.

En este nuevo estudio de la Universidad de California en San Francisco analizó los niveles de la vitamina en 680 pacientes recientemente diagnosticados con Parkinson y que no habían empezado el tratamiento. Fueron observados por un periodo de dos años en los que se desarrollaron evaluaciones cognitivas y físicas. Se les dio a los pacientes la opción de tomar un suplemento vitamínico controlado diario.

Luego, dividieron a los pacientes en tres grupos de acuerdo con los niveles de vitamina B12. Encontraron que aproximadamente 13% de los pacientes tenían bajos niveles de la vitamina, mientras un 5% tenían deficiencia de esta. El equipo encontró que los síntomas de la enfermedad se desarrollaron más rápido en los pacientes que con bajos niveles de vitamina B12. Las capacidades ambulatorias de los pacientes con bajos niveles demostraron mucha reducción en sus capacidades ambulatorias.

“Nuestros hallazgos demuestran que los niveles bajos de B12 se asocian con mayores problemas de equilibrio y de marcha, posiblemente debido al efecto conocido de la deficiencia de B12 en el sistema nervioso central y periférico «, dijo Chadwick Christine, MD, neurólogo y autor principal del estudio, en un comunicado de prensa de la universidad. «Alternativamente, la baja B12 puede tener un efecto directo sobre la progresión de la enfermedad de Parkinson, o puede ser un marcador de un factor asociado desconocido, tal vez se correlaciona con otro aspecto de la enfermedad o el estado nutricional.”

Aun falta realizar más estudios sobre esta vitamina y su relación con la enfermedad, pero estos estudios están abriendo nuevas puertas en el tratamiento de esta.

 

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Fuente: https://parkinsonsnewstoday.com/2018/03/14/b12-vitamin-supplements-may-help-delay-parkinsons-progression/


Importancia de una buena nutrición para las personas con Párkinson

La nutrición no cura ni disminuye el avance del párkinson; sin embargo, una dieta saludable puede ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas que lo padecen.

Un menú que incluya granos enteros es una gran opción ya que contienen la fibra que ayuda a controlar el estreñimiento, la glucosa en la sangre, la tensión arterial, el colesterol y las enfermedades cardíacas.

Asimismo, es importante incluir vegetales y frutas en los alimentos diarios pues proporcionan los antioxidantes, minerales y vitaminas que nutren y sustentan los músculos, el sistema nervioso y los órganos del cuerpo; por último, no puede faltar el calcio, ya que ayuda a mantener los huesos fuertes y prevenir fracturas.

En cuanto a los alimentos con proteína, se recomienda comer porciones pequeñas para mantener saludable el sistema muscular; unos músculos tonificados ayudarán siempre a mantener el equilibrio y la fuerza, aspectos vitales para las personas con párkinson.

Ahora que sabe esto, prepare los alimentos más ricos para usted y tus seres queridos y ayúdelos a llevar una dieta balanceada.

 

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¿Cómo cocinar fácil a pesar del Parkinson?

Ya hemos hablado de la importancia de mantener una dieta saludable para pacientes de Parkinson. Sin duda, la mejor manera de conservar la dieta es en casa, pero la enfermedad puede volver un reto cocinar. Puede ser incluso desgastante.

 

Hemos encontrado una serie de consejos de pacientes de Parkinson que hacen cocinar mucho más fácil. Así puedes mantener tu dieta y seguir en tu camino al tratamiento ideal.

 

1. Reúne todo lo que necesitas y ponlo en un solo lugar antes de empezar a cocinar. Tener una mesa de la altura de tu estufa y lavaplatos puede ayudar para que tengas donde sentarte y hacerlo con calma.

2. Toma todas las precauciones y organiza tu cocina para que sea lo más accesible posible. Puedes usar unos guantes resistentes a cortes, para prevenir accidentes con cuchillos.

3. Usa herramientas livianas, con buen agarre y que sean fáciles de manejar. Al elegir las herramientas que usas, te recomendamos que pienses en que manejar objetos no tan pesados va a ser mucho más fácil y menos desgastante.

4. Escoge recetas que no requieran que cocines dos cosas al mismo tiempo. Es muy común que los pacientes de Parkinson tengan problemas para realizar varias tareas al mismo tiempo. Recetas en las que puedes cocinar por partes te permiten concentrar tu atención en solo una cosa a la vez.

 

Agenda una cita con un especialista, llena nuestra autoevaluación y nosotros te contactaremos. Fuente: Michael J. Fox Foundation


Una buena dieta puede ayudar a reducir la ansiedad y el pánico

Uno de los problemas comunes que puede traer el Parkinson es ansiedad y desórdenes de pánico. Puede que no sean consecuencias que afecten la parte motriz directamente, pero se desencadenan como consecuencia de la enfermedad. La ansiedad produce miedos, estrés, nerviosismo y preocupación; lo que afecta la calidad de vida del paciente gradualmente, al mismo tiempo que la enfermedad. Algunas personas con Parkinson evitan interacción social, por miedo a ser criticados, juzgados o ser tratados diferente por su enfermedad.

 

Los desórdenes de pánico se categorizan como otro tipo de ansiedad, en los que el paciente tiene ataques de terror severos. Esto puede ocasionar temblor, problemas para respirar (problemas que también hacen parte de la enfermedad de Parkinson directamente). Estos ataques aumentan exponencialmente los síntomas de la enfermedad, e incluso pueden llegar a hacer que la medicina deje de funcionar.

 

La relación de la ansiedad y los desórdenes de pánico con la alimentación

En algunas personas, se ha encontrado que niveles bajos de ciertos nutrientes como el hierro, la vitamina D y la vitamina B6 están relacionados con la ansiedad y los ataques de pánico. En los pacientes de Parkinson, por razones desconocidas, se encuentra que hay una deficiencia de estos nutrientes.

El hierro está relacionado con la producción de neurotransmisores, incluyendo la dopamina. En un estudio, pacientes con deficiencia de hierro recibieron suplementos de hierro y encontraron una reducción en la ansiedad. Adicionalmente, otros estudios ya han señalado una relación entre la deficiencia de hierro y la ansiedad.

Así mismo, otro estudió encontró una relación entre la deficiencia de la vitamina D con la depresión, la ansiedad, pánico y la fobia. También se ha encontrado la relación entre la deficiencia de la vitamina D con problemas de ansiedad, pánico, depresión y fracturas de los huesos en pacientes de Parkinson.

Por último, se ha encontrado que las personas que tienen ataques de pánico tienen bajos niveles de serotonina, un neurotransmisor producido por la vitamina B6 y el hierro. Estudios han encontrado una relación entre esta deficiencia y los ataques de pánico.

Es por eso por lo que es importante que los pacientes que estén presentando problemas de ansiedad o ataques de pánico revisen sus niveles de hierro, vitamina B6 y D. Para hacerlo, pueden hablar con su médico para que les haga un examen de sangre, si tiene alguno de los niveles bajos el médico puede recetar suplementos alimenticios o hasta inyecciones para regular los niveles de la sangre.

Así mismo puedes regular tu dieta con la ayuda de un especialista. Habla con un médico que te ayude a regular tu dieta y que te pueda indicar lo que debes reducir en el consumo y lo que debes aumentar. Recuerda mantener un seguimiento constante de estas actividades con tu médico, para asegurarte que puedas manejar efectos secundarios o cualquier otra consecuencia que se presente.

 

Fuente: http://parkinsonslife.eu/diet-alleviate-anxiety-and-panic-disorders-parkinsons-kathrynne-holden/


Disfrutando de una dieta variada y balanceada con Parkinson

La enfermedad de Parkinson tiene un proceso evolutivo que puede desarrollarse durante años. Algunos hábitos que promueven la degradación neuronal están relacionados con la forma en que nos alimentamos y, por eso, es importante que tengamos en cuenta un estilo de vida con alimentación balanceada y sana. Así que acá traemos para ustedes algunos consejos que pueden ayudar a tener una dieta que plazca el paladar y ayude a nuestra condición.

 

Debido a que cada paciente tiene necesidades nutricionales diferentes, estos consejos no son un reemplazo a las dietas que nuestros médicos especialistas nos aconsejan. Estos son consejos que la Asociación Europea de la Enfermedad de Parkinson (EPDA) recomienda tener en cuenta, que sirven como complemento a aquellas recomendaciones de los médicos para ayudar al mantenimiento del cuerpo y prevención de desarrollo de la enfermedad.

 

Ayudando a nuestro estómago con tiempo

La condición de Parkinson usualmente trae varios daños colaterales en nuestra alimentación. Se nos hace más difícil comer, se nos hace más difícil procesar los alimentos y, en ocasiones donde se pierde el sabor y el gusto por la comida, las ganas de alimentarse de manera completa disminuyen. Por ese motivo, ajustar nuestros tiempos alimenticios es una buena práctica para ayudar a todos esos procesos y evitar cambios de peso extremos, constipación y problemas en la digestión.

Para ello, se recomienda tener un control de calorías consumidas y una distribución alimenticia alrededor del día. El desayuno debe suplir el 20% de las calorías totales del día, el almuerzo y la cena deben suplir un 35% cada una y un par de refrigerios deben suplir el 10% restante. Bajo esta distribución, lo ideal es que entre desayuno-almuerzo y almuerzo-cena exista siempre un pequeño refrigerio. Idealmente, no debemos dejar que pasen más de dos horas entre comidas.

También se recomienda tener un diario alimenticio. Este nos permitirá tener control sobre las porciones, los tiempos y la cantidad de proteínas, fibra, carbohidratos y grasas consumidas. No solo nos ayudará a recordar mantener una rutina y una estructura alimenticia, sino que puede ser una buena guía que nuestros médicos especialistas utilicen para brindar un mejor tratamiento.

 

Evitando las comidas difíciles de masticar y tragar

La disfagia es uno de los síntomas más comunes en los distintos pacientes con la condición de Parkinson. El proceso de masticar y tragar es uno muy complejo, en especial cuando la enfermedad avanza. Por eso, ayudar al sistema digestivo a consumir los alimentos de manera más sencilla siempre ayudará al mantenimiento de nuestros hábitos alimenticios.

En rasgos generales, se recomienda no consumir alimentos que tengan consistencias diferentes (por ejemplo sopa con fideos), así como también se recomienda evitar alimentos sólidos partidos en piezas pequeñas, como el arroz. Es mejor consumir alimentos que puedan ser compactados, mantener una consistencia estable y ayudar a la digestión acompañándolos con salsas.

A nivel de fluidos, se recomienda ir por sorbetes, malteadas y líquidos con agentes de espesor. Los fluidos ligeros como el agua, los jugos, el té y el café pueden ser peligrosos al tragar, por su facilidad de atorar en caso de un espasmo involuntario. 

Los panes y cereales deben ser enteros y de mezclas homogéneas, como el pan blanco o los pancakes. Se recomienda no comer cereales pequeños, panes con semillas o alimentos como el arroz inflado debido al mismo efecto de los fluidos en caso de un espasmo.

Productos lácteos densos como la mantequilla, los yogures y helados pueden ser consumidos sin dificultad. Pero hay que evitar lácteos como el queso derretido o la leche para evitar problemas de atasco.

A nivel de carnes, se recomienda que al comer los cortes sean suaves o la carne molida. Hay que evitar carnes secas, carnes con huesos y cortes gruesos.

Las verduras y frutas deben consumirse de la forma más suave y hay que evitar, en lo posible, el tener que masticar. Para ello pueden procesarse en forma de puré, dejar que las frutas maduren o preparar los vegetales al vapor para suavizarlos.

 

El plan de dieta de 10 días

Quedarnos en una rutina alimentaria puede ser desgastante y desanimador si no existe variedad en el tipo de alimentos que consumimos. Para solucionar este inconveniente, el equipo de Zambon junto a la EPDA crearon un plan de alimentación de 10 días que nos permitirá comer de forma variada, balanceada y atendiendo a nuestras necesidades.

Nosotros también podemos crear nuestro plan alimenticio de 10 días o pedirle a nuestro médico especialista que construya un menú junto a un nutricionista. En cualquier caso, 10 días es un buen esquema que nos permitirá disfrutar de los alimentos sin sentir que estamos constantemente comiendo lo mismo de siempre.

Esperamos estos consejos sean de utilidad. No olviden consultar con sus médicos especialistas cómo pueden complementar sus dietas al aplicar estos consejos.