Cada persona con Parkinson es única, y también lo es cada cuidador. A muchas personas no les gusta el termino cuidador ya que no sienten que están brindando cuidados, pero recuerde que los cuidados no se limitan a tareas físicas, pueden ser emocionales o espirituales. Los cuidadores no solo están a cargo de asistir a la persona con Parkinson, también realizan muchas actividades de la vida cotidiana, como criar niños, trabajar, preparar comida, quehaceres domésticos y al mismo tiempo también están afrontando sus propios problemas personales o de salud. Los siguientes consejos pueden ayudarle en el día a día:
*Perdónese por no ser perfecto. Cuidar a alguien con una enfermedad crónica significa que su mundo se revolucionará por completo. Su rutina cotidiana cambiará definitivamente y es probable que tenga que hacer cambios. Acepte su propia humanidad, que puede cometer errores y nos ser perfecto todo el tiempo. ¡Reconozca que hace las cosas lo mejor que puede!
*Reconozca su derecho a sentirse emocionalmente desestabilizado. Reconozca sus emociones como enojo, ansiedad, culpa y tristeza. Valide sus emociones y busque a alguien que lo comprenda o pueda ayudar en el proceso.
*Determine sus límites. Todo el mundo tiene límites. ¿Cuáles son los suyos?
*Priorice tomar descansos del cuidado asistencial con regularidad. No puede ser buen cuidador de otra persona si no se cuida a sí mismo. Su ser querido podrá sobrevivir unas horas y, de vez en cuando, algunos días sin usted.
*Sea amable con usted mismo. Recuerde que está teniendo reacciones normales ante circunstancias desconocidas para usted.
*Busque la alegría en su relación con la persona con Parkinson. Las tareas prácticas, tales como bañar y vestir a su ser querido, pueden parecerle un trabajo, pero en realidad estas tareas los unen. Agregue un poco de diversión a los cuidados prácticos: cante canciones, cuente chistes, comparta objetivos y sueños.
*Promueva el hábito de participar en actividades conjuntas más allá de los cuidados. El tiempo compartido como esposo-esposa, madre-hija, hermanos u otro tipo de relación, en lugar de cuidador-persona que requiere cuidados, o incluso como compañeros de cuidados, les permite disfrutar mutuamente y crear recuerdos felices. Esta puede ser una oportunidad para crear un vínculo más cercano.
*Trate de perdonar a su ser querido por las heridas del pasado. El resentimiento con respecto a los errores y las injusticias del pasado dificultará su función actual en relación con el cuidado asistencial. Deje el pasado atrás o busque ayuda profesional, y concéntrese en hábitos saludables y productivos.
Recuerde… “Ser cuidador probablemente sea el trabajo más difícil que tenga que desempeñar en su vida. La única forma de hacerlo es cuidándose a sí mismo. No puede decir: No tengo tiempo para mí. La persona a la que cuida quiere lo mejor para usted porque usted le está dando lo mejor. No se convierta en un mártir. Está bien cuidar de uno mismo” (Son las palabras de Karen, cuidaba de su padre Joseph).
FUENTE:
Cuidado y manejo, la guía completa para el manejo de la Enfermedad de Parkinson.
PARKINSON’S FOUNDATION.
https://www.parkinson.org/sites/default/files/attachments/Cuidado-y-manejo-guia.pdf